Con una inversión de 32 billones de pesos los hogares colombianos adquirieron el año anterior 172 mil viviendas nuevas según el sistema de información de Camacol Coordenada Urbana. De estas viviendas nuevas, 102 mil fueron de vivienda social y 70 mil fueron No VIS.
Para Sandra Forero Ramírez, presidente Ejecutiva del Camaco “el 2018 fue un segundo año de menor actividad comercial y en particular en el lanzamiento de nuevos proyectos, luego del máximo histórico de 2016. Ese comportamiento estuvo alineado con el contexto económico y el desempeño de los determinantes del sector. Sin embargo, la vivienda social se destacó como el segmento de mayor relevancia del mercado, permitiendo cerrar el año por encima de las expectativas”.
A nivel regional, se destaca el comportamiento observado en Bogotá, Cundinamarca, Norte de Santander y Boyacá, regiones donde se registraron crecimientos anuales en las ventas de vivienda nueva de 15%, 22%, 40% y 24%, respectivamente.
“Es muy importante que los municipios prioricen la provisión formal de vivienda para la población y ponderen la relevancia económica de la inversión inmobiliaria para el empleo, la dinámica industrial y el crecimiento económico las regiones. El 2019 será un año con retos importantes en materia económica, y sumado a una creciente demanda de vivienda nueva, la mejor forma para hacer frente a estos factores es adoptar medidas para habilitar suelo urbanizable y actuar como facilitadores del desarrollo urbano formal”.