LA INGENIERÍA EL MOTOR DE LA REACTIVACIÓN.
Nos encontramos en la etapa de prevenir y contener el virus COVID 19, el gobierno ha expedido una serie de medidas para atenuar la crisis; el aislamiento obligatorio tal vez ha sido la decisión más difícil, pero debemos reconocer que fue oportuna y luce exitosa; las medidas complementarias que día a día toma el gobierno son adecuadas, enfocadas en los más vulnerables y entendiendo el sufrimiento de muchos sectores. El camino correcto es ese, cada sector viene exigiendo medidas y poco a poco se van dando y por eso es necesario respaldar decididamente al gobierno en su tarea de llegar lo más rápidamente posible a la población de menos recursos: informales, independientes, desempleados, migrantes y campesinos. Los esfuerzos para que las ayudas lleguen rápidamente a todos los rincones del país serán realmente aquellos que logren atenuar el problema, no será la solución perfecta, pero ese es el camino. Esta guerra la enfrentan los médicos, enfermeros y demás auxiliares de la salud. La humanidad espera y confía que los investigadores y científicos brinden la solución, ¡que paradoja!; los dos son los sectores que menos atención han tenido históricamente.
Todos los gremios deben entender que la población de menores recursos indirectamente soporta las actividades de la economía general, es un grupo genérico difícil de caracterizar de manera individual, con poco o limitado acceso formal a la salud y a los beneficios sociales y que es imperioso evitar un conflicto social que traería consecuencias desastrosas.
Los otros sectores poco a poco sentirán que las ayudas van llegando. No todo es dar dinero, ejemplo claro son las acciones que toma el gobierno para garantizar el empleo a las personas, congelar arriendos, congelar precios de la canasta familiar y garantizar suministros. En el futuro apreciaremos y exaltaremos estas acciones. Hay que comprender que nadie estaba preparado para esta crisis y cada país de acuerdo con sus recursos y su organización, debe enfrentarla con inteligencia. La comparación con otros no es oportuna, debemos estar unidos y ser solidarios, pues el gobierno lo está haciendo bien. No se deben desconocer los impactos que tendrá la economía colombiana por los bajos precios del petróleo.
La ingeniería en general ya está analizando cómo prepararse para la reactivación; la SCI presentará su propuesta. El gremio será el actor fundamental para retomar el rumbo; una vez los héroes de la salud nos den buenas noticias relacionadas con el control de la pandemia, entraremos a asumir la responsabilidad de reactivar el país. Más de tres millones de trabajadores de la ingeniería más los empleos indirectos, apoyarán el nuevo reto. Es tal vez la única etapa después de una crisis en donde la ingeniería puede empezar a trabajar con las mejores condiciones, no hay daño en infraestructura, ni en centros de producción y el número de muertos es relativamente bajo; pandemias anteriores dejaban la población disminuida considerablemente; las guerras dejaban una gran destrucción material y pérdidas sensibles de vidas humanas; tal vez algún ganador, en las circunstancias actuales todos los países pierden.
Estamos ya pensando las estrategias. Los principios fundamentales estarán cimentados en la gente, la solidaridad y la responsabilidad.
El primer gran acuerdo debe ser sobre la bioseguridad, toda la cadena de valor en la ingeniería debe ser consciente y responsable y aplicar los protocolos más estrictos., El segundo estará encaminado a darle liquidez a las empresas constructoras y consultoras, proveedores de materiales y servicios conexos; las fórmulas más expeditas estarán asociadas a que rápidamente y con las reservas presupuestales existentes, se pueda anticipar pagos de obra y recursos a los consultores sobre los promedios anteriores, anticipar recursos para pago de insumos y mano de obra a consultores, habilitar que parte de este anticipo de obra deberá dedicarse a la adquisición de materiales. Así se generará inercia de manera más rápida
El tercer punto estará dirigido a que de manera rápida se paguen todas las acreencias del Estado con particulares, es decir pagar cuentas en curso.
La cuarta acción estará encaminada a valorar y reconocer a las empresas que fueron solidarias con el país, y no despidieron, ni enviaron a licencias no remuneradas a sus empleados un porcentaje de lo invertido en estos conceptos.
El último punto, estará encaminado a que durante los próximos seis meses se aplace el pago de impuestos nacionales, departamentales y municipales; el IVA sea reembolsado en enero de 2021. No queremos con esto desfinanciar al Estado; es el apoyo requerido, entendiendo que el gobierno debe acudir a sus fuentes de financiación tales como reservas internacionales o banca multilateral. Si no se hace este esfuerzo caeremos en la espiral de quiebra de empresas que al final tampoco le darán recursos al Estado y se incrementará el desempleo dramáticamente.
Un aspecto importante será solicitar la creación y operación de una plataforma, dirigida desde la Presidencia de la República que incluya, todas las medidas referentes al COVID 19, decretos presidenciales, estadísticas de la pandemia, zonas con mayores contagios, estudios mundiales sobre el tema, comunicados, apoyos y centros de distribución de ayudas, policía, ejército, ambulancias, hospitales disponibles para atender la situación de emergencia provocada por el virus, etc. Es necesario que se centralice toda la información., Muchos países cuentan con un ente central de atención de desastres, generalmente adscrito a la presidencia respectiva.
Con estos apoyos, la ingeniería será el eje de la recuperación, el ejemplo de optimismo y el motor apaciguador de las necesidades de la población. En poco tiempo se verán los resultados. Estamos listos para reiniciar.
Finalmente, quisiéramos indicar que son momentos en los que no se puede exigir. Lo que hay que pensar es cómo con los recursos existentes ordenamos el rumbo y reimpulsamos la economía. El ingeniero Alejandro Gaviria de la Universidad de los Andes, en reciente entrevista nos recordó una frase de Aldous Huxley de hace 60 años, «La moral de la conservación no concede a nadie una excusa para sentirse superior ni para reclamar privilegios especiales»”. El presidente Rafael Reyes dijo después de la guerra de los mil días… «menos política y más administración», y en esa época nuevamente la ingeniería fue el bastión de la recuperación del país.
GERMÁN PARDO A.
Presidente
Sociedad Colombiana de Ingenieros
