De acuerdo con las cifras de Coordenada Urbana, las ventas de vivienda nueva alcanzaron en el primer semestre del año 83.224 unidades, de las cuales 50.301 fueron viviendas de interés social, 24.030 las unidades del segmento medio (entre 135 y 435 smmlv) y 8.893 unidades las viviendas del segmento alto (más de 435 smmlv)
Para Sandra Forero, presidente ejecutiva de Camacol, “los resultados obtenidos confirmaron el ajuste del sector a la realidad económica del último año. Para el segundo semestre esperamos una recuperación teniendo en cuenta las señales positivas del contexto macroeconómico. Sin embargo, para asegurar una buena dinámica del mercado se hace prioritaria la continuidad de los programas de vivienda social para los próximos años y así garantizar el acceso a la vivienda formal en los segmentos de gran demanda habitacional”.
A junio de 2018, la oferta de vivienda nueva llegó a las 139.881 unidades, de las cuales 52.416 hacen parte del segmento VIS, 60.175 del segmento medio y 27.290 del segmento alto.
Dentro del documento de propuestas entregado por Camacol al Gobierno entrante, se fijó como uno de los propósitos centrales el de garantizar el acceso a la vivienda formal mediante iniciativas que buscan dar continuidad a la cobertura a las tasas de interés y al subsidio a la cuota inicial para las VIS, promover la profundización en la financiación de vivienda y generar incentivos al ahorro e inversión en vivienda nueva, así como promover el arriendo como un instrumento para que la población de menos recursos pueda acceder a la vivienda.