El conjunto Alegra, desarrollado por la constructora CFC en Manizales, es el primer proyecto de Vivienda de Interés Social en Colombia que alcanza la certificación EDGE beneficiando de esta manera a las familias que lo habitarán y que proveen confort, calidad de vida y ahorro en servicios públicos gracias a los elementos sostenibles que se incorporaron durante el proceso de diseño y construcción.
Para Obtener esta certificación EDGE se tuvo que validar y auditar ahorros de por lo menos un 20% en el consumo del agua, energía y energía incorporada en los materiales de construcción. Al obtener la certificación, el proyecto fue beneficiario de la línea de financiación verde que ofrece Bancolombia, con una tasa de interés menor, gracias a los recursos del primer bono verde emitido por este banco en el año 2017. Los compradores a su vez podrán acceder a tasas diferenciales para su crédito hipotecario.
Para la presidente Ejecutiva de Camacol, Sandra Forero Ramírez: la certificación de proyectos VIS es un logro importante dado que uno de los retos de Camacol desde que acepto ser el socio local de IFC para la certificación EDGE, ha sido el certificar viviendas de interés social aportando a mejorar la calidad de vida de sus habitantes en cuanto a confort y ahorro en servicios públicos.
La sostenibilidad en construcción, que empezó en Colombia a través de edificaciones comerciales, ha permeado diferentes tipos de edificaciones hasta llegar al segmento residencial, que representa el 80% de las licencias del país y especialmente a la vivienda social, que significa el 24% del total de área licenciada, es decir, aproximadamente 4,3 millones de metros cuadrados construidos por año.
A la fecha, más de 400.000 metros cuadrados de 32 proyectos de construcción se encuentran en proceso de obtener su certificación, tres de ellos ya obtuvieron la certificación de su diseño: Alturia de Núcleo Constructora, en Pereira; Biel de Solider S.A., en Barranquilla; y Verona de Integra Gerencia y Construcción, en Valledupar.
Así mismo, dos proyectos más finalizaron la construcción y alcanzaron la certificación final: Ariza Vivienda de Conaltura, en Itagüi; y Hotel Conrad Karibana de Megaterra Colombia, en Cartagena.
De igual manera, instituciones de educación superior como la Universidad Javeriana y Santo Tomas han decidido implementar la certificación EDGE como parte integral de su infraestructura. Actualmente nueve edificios, entre nuevos y existentes, se encuentran en proceso de certificación en tres ciudades de Colombia.
Kristtian Rada, líder del Programa de Ciudades y Negocios Sostenibles de IFC para Latinoamérica y el Caribe, afirmó que el sector privado está contribuyendo cada vez más a la mitigación y adaptación del cambio climático de una forma inteligente, mostrando que ser sostenible es un buen negocio.
La construcción sostenible está transformando la actividad, la cual ha evolucionado en respuesta a un mercado con necesidades cada vez más específicas, mientras que los constructores han respondido con una propuesta de valor donde la sostenibilidad juega un papel protagónico. Camacol está comprometido con liderar esa transformación y masificar la construcción sostenible en el país a través de la certificación EDGE, anotó la Presidente de Camacol.